miércoles, 23 de junio de 2010

Los Chimu

Mediterráneo, 7 de octubre de 2004
LOS CHIMU
Hoy hablaremos de algo que a los aventureros y curiosos de la historia les encantara: antiguas civilizaciones. Tenemos cierta deuda con Hispanoamérica, no por una conquista denostada, que no hizo más que repetir la historia de la humanidad, en la que unos pueblos se imponen sobre otros por la fuerza, la economía, la religión o de otros modos, si no porque no les supimos dar el grado de desarrollo con el que hoy contamos en España, una forma de paliar esto, además de con contribuciones económicas, es con el estudio de las civilizaciones precolombinas, alguna de las cuales aun subsiste ya que nosotros favorecimos el mestizaje, no como los ingleses que las exterminaron impunemente. Con los libros de Tintin: el Templo del Sol y la Oreja Rota descubrí el mundo andino, pero hay un fallo y es que el ídolo que sale en el 2º , no es Inca sino Chimu que es una civilización anterior, tuve noticia de su existencia por una exposición artística ya que como la mayoría no tenia ni idea y me plante, en la ciudad de Trujillo cerca de la cual se encuentra Chan-Chan, que fue la capital Chimu y la ciudad más grande del Perú prehispánico ocupando mas de 20 Km2 tiene 10 palacios separados por muros de adobe de hasta 9 metros de alto y 3 de base, hoy la mayoría están deteriorados pero el espectáculo es fantástico y son Patrimonio de la Humanidad. La cultura Chimu o Chimo o Chimor surgió en la costa norte del actual Perú con el héroe Taycanamo que era el Chimu Capac o sea el jefe, esta consolidada en el S.XII y alcanza su esplandor a principios del S.XV, siendo conquistada por el Inca en 1470. Representa una milenaria continuidad de las civilizaciones andinas, Moche, Lambayeque o Chavin, entre otras, que a través suyo continúan tecnológica e iconográficamente con los incas, el culto principal era “si” la luna, más poderosa que el sol porque aparece de noche y de día. ¿Porque me llamarán la atención los Chimo?, pues porque yo me llamo Joaquín y soy valenciano con lo que mis amigos me llaman Chimo, que casualidad ¿no?.

No hay comentarios:

Publicar un comentario