BELLEZA INTERIOR
Que guap@ eres, que
cara tan preciosa, que ojazos y que cuerpo tan ideal. Todo el mundo admira ese
físico privilegiado. Es la belleza exterior que debe alegrar a quien la posea,
es algo positivo, pero siendo consciente
de que no es eterna, y que envejecer con dignidad es bueno para cualquier
persona. Pero no debe obsesionarse ni ser su live-motiv. Al fin es solo
apariencia. Hoy está sobre valorada, la publicidad y la sociedad de consumo la
tienen como paradigma. Si es natural mejor pero
se puede alcanzar con cirugía, maquillaje o photoshop. La realidad es
que lo más importante, lo esencial es la belleza interior. Esa si es
fundamental. Es la que determina la personalidad formada por muchos factores:
cultura, inteligencia, responsabilidad, carisma, autenticidad, valores,
lealtad, creatividad, voluntad, solidaridad, positividad, etc. Esta no
desaparece con la edad, al contrario si se tiene se va incrementando con el
tiempo. No se ve físicamente, pero se
irradia y se puede sentir, es lo que hace a la gente atractiva con chispa, mágicos, y lo que les hace felices
a ellos y a los suyos. Si por dentro eres fe@ y mala persona, da igual como
seas por fuera, porque transmitirás toxicidad a todo el que te rodee y serás
desdichad@. La belleza exterior se convierte en un velo para disimular la
fealdad interior. Es como una cajita que puede ser preciosa pero al abrirla,
ves que está vacía o sucia y sufres una decepción. Sin duda lo espiritual es
más importante que lo material. La belleza interior que la exterior. Si tienes
las dos, enhorabuena.
Artículo publicado en
el periódico Mediterráneo 6 de agosto de 2018