Horchata de chufa

Mediterráneo, 28 de agosto de 2003
HORCHATA DE CHUFA
Madre mía, en esto como en tantas otras cosas (toros, paellas, tortilla etc.) si fueran americanas las tendríamos en todas partes, pero como es algo nacional tendemos a menospreciarlas, grave error.
Desde luego en estos días tan calurosos que estamos atravesando, lo mejor para refrescarse de modo sabroso y natural es la horchata y con unos buenos fartons o cualquier orea bollería, mejor, como su nombre indicase saca de la chufa que, además de un bofetada o tortazo es un fruto seco que parece ser procede del antiguo Egipto donde se han encontrado tumbas de faraones con estos tubérculos.
Los árabes la introdujeron en tierras españolas y especialmente en la zona valenciana cuyas huertas resultaron muy adecuadas para su cultivo y hoy producen 3 millones de kilos al año.
Existe una leyenda sobre la procedencia de su nombre, y es que un día Jaime I pasaba todo acalorado, 40 grados en veranito bajo un cota de malla, y una aldeana le dio a beber y el rey preguntó: ¿Qué es aixó?, la muchacha respondió: "Es leche de chufa", y replicó el monarca "Aixó no es llet, aixó er OR, XATA" (esto no es leche, esto es oro, chata) que traducido al castellano queda como horchata.
Es muy curioso ver como se elabora con chufas, azúcar, agua y canela en rama, chafando y lavando las chufas. Es buena para la salud por ser altamente energética o diurética con alto contenido en hierro y potasio y otros minerales y vitaminas.
Afortunadamente cada día se cuida más a través del Consejo Regulador de las denominaciones de origen de la chufa de Valencia, con lo que se asegura la calidad, parece que lo único que falta para su difusión internacional es un proceso de envasado que conserve su sabor.
Está buenísima de cualquier forma, líquida, granizada o mezclada con cebada o café, yo todas las tardes me tomo mi horchacheta, qué rica.