lunes, 30 de agosto de 2010

Defensa del hogar

Mediterráneo, 19 de enero de 2006
DEFENSA DEL HOGAR
Estás en tu hogar, es confortable y seguro, viendo la tele, cenando, durmiendo o charlando con los tuyos, tu mujer, tus hijos, los abuelos. Has trabajado duro para conseguir esta situación que reporta a toda la familia tranquilidad y felicidad, es un ideal al que casi todos tendemos y algunos conseguimos. De repente ya oscurecido, irrumpen unos individuos, casi siempre hombres, casi siempre extranjeros y siempre mal encarados y peligrosos. Asombrado por la situación, sin creerte que te puede estar pasando a ti y sin saber que hacer, si tienes suerte piensas que robarán y se irán sin más, si no, palizas, torturas, violaciones y asesinatos están a la orden del día. Sin excluir mujeres, niños ni ancianos que son los que primero sufren los ataques de estos animales. Si no les gusta lo que encuentran o quieren más la situación se torna más peligrosa, no entienden que hoy casi nadie guarda dinero en casa.
Según los consejos sensatos lo mejor es hacerse el dormido o dales lo que pidan y no resistirse. Idea que ha calado en la conciencia ciudadana y consigue una sociedad cobarde. Si las fuerzas del orden, alarmas, guardias de seguridad, etc., no logran evitar esto, algo habrá que hacer. Un ciudadano más valiente que otros, en legítima defensa usó su arma legal y acabó con dos de estos tipejos, no será políticamente correcto, pero ojalá hubiese acabado con todos los que entraron con muy malos propósitos a su hogar. Tiene mi compresión, mi felicitación y mi apoyo. Es una lección para el chorizo que entra a robar que no esté seguro de su impunidad, que sepa que hay gente que se va a defender y que se juega más que un entra-sale de la cárcel.

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