martes, 18 de mayo de 2010

Mediterráneo, 11 de mayo de 2010.

COMENTARIOS MALICIOSOS
Cuentan que un día Sócrates se encontró un conocido que le dijo, ¿sabes lo que escuché acerca de tu amigo? –Antes de decirme nada respóndeme a una pregunta, ¿estás absolutamente seguro de que lo que vas a decirme es cierto? –No, sólo escuché sobre eso. –Bien, entonces no sabes si es cierto o no, y ¿es algo bueno sobre mi amigo? –No, por el contrario... –Entonces deseas decirme algo malo de él, pero no estás seguro que sea cierto, pero ¿me serviría de algo saber lo que vas a decirme de mi amigo? –No, la verdad que creo que no. –Si lo que vas a decirme no es cierto ni bueno ni útil ¿para qué querría yo saberlo?
Esto nos enseña que las habladurías que se oyen sobre amigos hay que filtrarlas, es absurdo perder una amistad por comentarios infundados o malos entendidos. Hay muchas cosas que se dicen y fuera de contexto cambian su sentido o palabras salidas de una calentón que no son sentidas y qué decir de la tercera mano, el jueguecito de un grupo de personas en que el primero dice algo al segundo y cuando llega al último no tiene nada que ver, pues imagínenselo en el amplio círculo de la vida, terreno abonado a chismosos, cotillas, hipócritas y cobardes y casi seguro envidiosos, de tu buena relación con quien sea y como ellos no tienen nada parecido, mejor destruir las de los demás, mediocres de vida insignificante que tienen que refugiarse en el perjuicio a otros, es el habla mal que algo queda, y si lo lías un poquito mejor, sin considerar el daño que pueden hacer. Pueden ser sólo estúpidos pero muchos son realmente malos. Tú sabrás si es mejor creer lo que te cuentan o es mejor aclarar la cosa cara a cara, si merece la pena perder un amigo de corazón, por tonterías. Yo creo que no.

No hay comentarios:

Publicar un comentario