NO SUFRAS

Mediterráneo, 19 de julio de 2007
NO SUFRAS
Sufrir es algo que no podemos evitar, y que nos afecta a todos, nadie está libre de una mala experiencia y la reacción que ésta nos produce es el sufrimiento que será de mayor o menor intensidad o duración, depende del golpe y el carácter de cada cual, es imposible medirlo y totalmente subjetivo. Hay gente con mucho aguante, que parecen témpanos de hielo aunque la procesión va por dentro y otros “patidores” que todo les parece un mundo, constantemente preocupados y negativos, incluso sufriendo por daños inexistentes o con miedo al futuro donde creen que todo les saldrá mal, y ello hasta el punto que puede constituir una patología.
La mayoría de los sufrimientos obedecen a un acontecimiento real, que te crea algún perjuicio indeseado, puede ser cualquier cosa, desde un suspenso o que pierda tu equipo hasta los realmente graves, enfermedades, ruina, golpes amorosos y el peor, que es la pérdida de un ser querido, porque todo lo demás se puede solucionar con más o menos tiempo y esfuerzo, pero en este caso se junta con el vacío de algo que no tiene remedio y sólo queda asumir y tratar de superar la amargura. Luego hay sufrimientos por causas generales como el hambre o las guerras, respecto de los que poco podemos hacer para solucionarlos. Si es personal, la solución posible, no va por guardarse todo y reventar, ni por gritar y tratar de impresionar con grandes aspavientos, va por analizar la causa y ponerle solución, ser positivo, aprender de los reveses, compartir, ayudar y comparar, darse cuenta de la cantidad de desgracias que ocurren en el mundo y que en el fondo lo nuestro no es tan trascendente, inténtalo que lo conseguirás, no sufras.