EGO, EGO, EGO
Egoísta, egocéntrico,
egolata, yoista, varias caras de la misma moneda (falsa). Yo, mi, me, mío, a mí, para mí,
conmigo, el centro de todo, los demás son secundarios, circunstancias
colaterales. Quien así piensa y actúa, está equivocado? enfermo?, trastornado?. No haría afirmaciones
categóricas porque existe la filosofía del egoísmo moral o ético que afirma que
obrar en el propio interés es lo adecuado y lo mejor para la sociedad.
Considera que el altruismo, que busca el bien ajeno antes que el propio es
negativo porque supone sacrificar las propias necesidades para cubrir las de
otros, que no conocemos con certeza. Es cierto que no puedes ayudar a nadie si
tú no estás bien, ( ej: mascaras de oxigeno en los aviones) pero también lo es
que el amor excesivo a sí mismo, lleva a descuidar, incluso abandonar el de los
demás y a la falta absoluta de empatía. No encaja bien en sociedad ni en
familia, ni en pareja quien se guía solo por su conveniencia, por su interés
personal y por su propio provecho, aunque eso perjudique a los demás. Recibe pero no da. El ser egoísta nace de una
carencia personal, de un desarrollo incompleto, por la edad, las circunstancias
o una educación defectuosa, de la inmadurez, de la inseguridad, de la falta de
autoestima, de considerar que se lo merece todo, que si algo está mal la culpa
es de los otros de no aceptar una crítica, ni escuchar, ni respetar a los
demás. Y sigue su camino sin importarle las consecuencias. Es una pena porque
tarde o temprano recibe lo que ha sembrado que solo puede ser su propia y merecida desgracia.
Artículo publicado en
el Periódico Mediterráneo el 22 abril de 2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario