martes, 23 de abril de 2019

EGO, EGO, EGO


                                           EGO, EGO, EGO
Egoísta, egocéntrico, egolata, yoista, varias caras de la misma moneda  (falsa). Yo, mi, me, mío, a mí, para mí, conmigo, el centro de todo, los demás son secundarios, circunstancias colaterales. Quien así piensa y actúa, está equivocado?  enfermo?, trastornado?. No haría afirmaciones categóricas porque existe la filosofía del egoísmo moral o ético que afirma que obrar en el propio interés es lo adecuado y lo mejor para la sociedad. Considera que el altruismo, que busca el bien ajeno antes que el propio es negativo porque supone sacrificar las propias necesidades para cubrir las de otros, que no conocemos con certeza. Es cierto que no puedes ayudar a nadie si tú no estás bien, ( ej: mascaras de oxigeno en los aviones) pero también lo es que el amor excesivo a sí mismo, lleva a descuidar, incluso abandonar el de los demás y a la falta absoluta de empatía. No encaja bien en sociedad ni en familia, ni en pareja quien se guía solo por su conveniencia, por su interés personal y por su propio provecho, aunque eso perjudique a los demás.  Recibe pero no da. El ser egoísta nace de una carencia personal, de un desarrollo incompleto, por la edad, las circunstancias o una educación defectuosa, de la inmadurez, de la inseguridad, de la falta de autoestima, de considerar que se lo merece todo, que si algo está mal la culpa es de los otros de no aceptar una crítica, ni escuchar, ni respetar a los demás. Y sigue su camino sin importarle las consecuencias. Es una pena porque tarde o temprano recibe lo que ha sembrado que solo  puede ser su propia y merecida desgracia.
Artículo publicado en el Periódico Mediterráneo el 22 abril de 2019

No hay comentarios:

Publicar un comentario