CERCANIAS
LA GRAN AVENTURA
La emoción, el riesgo,
la incertidumbre sobre si llegarás a la meta, una autentica aventura es lo que
puedes vivir hoy por 11euritos si tomas el tren de cercanías Castellón-Valencia
(C-6) o viceversa. Lo que hasta el verano era un muy buen servicio con
frecuencias medias de 20 minutos, gran número de pasajeros, mayoritariamente
satisfechos, puntualidad aceptable y posibilidades de saber a que hora sales y
llegas, o sea de planificarte Hoy ha desaparecido, ha sido sustituido por el
caos, los retrasos constantes, protestas, molestias, falta de información o
peor información errónea, suspensiones, saturaciones o cambio de trenes o de
vagones. Las frecuencias han pasado de 41 a 18 teóricamente son de una hora, es
verdad hora y media para coger un tren a reventar, donde a lo peor no hay sitio
para sentarse. Y además quitan vagones. Es una vergüenza y una falta de respeto
al usuario, que cada vez disminuye en número como no podía ser de otra forma.
Olvidando al consumidor y que el transporte de cercanías es el más usado por
miles de personas. El AVE está muy bien pero primero hay que poder llegar a lo
que tienes cerca. La ministra Ana Mato, dijo que se acabaría antes de fin de
año, mintió, nunca ha tenido aprecio a la Comunidad Valenciana, la prueba es
que es donde menos invierte. Y todo esto es el resultado del tercer carril,
chapuza que sustituye a las nuevas vías que habría que hacer y que no causarían
estos problemas. Cuando este hecha, ojala me equivoque, puede ser peor, por
ella irán pasajeros, mercancías, largo recorrido, cercanías y la tía María.
Ahora mal, después quizás peor.
Columna publicada en el
Periódico Mediterráneo el 7 de diciembre de 2015
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