DESPISTADO

DESPISTADO Andas despistado, tienes demasiadas cosas en la cabeza, das vueltas a cómo solucionar este o aquel problema, mientras charlas con alguien de otra cosa, tu estas aquí y tu cerebro Dios sabe dónde. Para colmo no ves tres en un burro, la presbicia te ha derrotado en toda regla y sin gafas estas perdido, con ellas solo un poco mejor. Tras muchos años y un poco de sociabilidad, y más si tu trabajo es cara al público, has ido conociendo infinidad de personas, los amigos siempre son pocos, los conocidos muchísimos. Todos te alegran la vida, es muy bonito ir por la calle dando los buenos días con una sonrisa y que te los devuelvan, un buen apretón de manos, dos besos o incluso un abrazo de colegas. A contrario es muy triste no recibir ningún saludo y muy feo no devolverlo, hacerse el sueco, o incluso, por prepotencia o directamente mala educación no responder. Les aseguro que entre mis muchos defectos jamás caería en ese, procuro ser cordial no como pose sino porque me gusta y soy así. Si en alguna ocasión no he respondido adecuadamente, en primer lugar solicito disculpas que espero conseguir de la magnanimidad de los afectados, pero que conste que ha sido por todo lo expuesto al principio y jamás conscientemente con mala fe.